Kandinsky, Impresión III (Concierto), 1911 |
Armonía, tonos, matices, escalas:
son todas palabras técnicas que comparten tanto la música como la pintura.
Estas analogías se usaban ya en la Antigüedad; la pintura estaba por debajo
de la música. Ésta tiene un efecto directo sobre el alma, se desarrolla en el
tiempo, la interpretación musical es distinta cada vez que sucede. La pintura,
en cambio, no: se da todo junto, al mismo tiempo, no en una sucesión temporal,
y se da en una única vez.
Hasta tal punto que los artistas, que, cuando querían
representar una alegoría de la armonía, acudían a instrumentos musicales. Mira
este cuadro de Veronese: representa a Tiziano, a Tintoretto y a Bassano, cada
uno con un instrumento musical diferente.
Veronese, Las bodas de Caná, 1562 |
La relación sonido-colores
fascinó a unos cuantos musicólogos, filósofos, estudiosos de todo tipo… Piensa,
p.ej., en el poema de las vocales de Rimbaud: para él, a cada una de ellas le
corresponde un color según cómo suena (lo tienes aquí).
Mondrian, Victory Boogie-Woogie, 1944 |
Klee, Kandinsky, Matisse, Ingres,
Delacroix, van Gogh estudiaron música e indagaron en la pintura estas
relaciones. Así como Mondrian, con su serie de jazz y boogie-woogie. (Sobre
Paul Klee como músico puedes ver este artículo.)
Los sonidos pueden ser
fraccionados en proporciones aritméticas; los colores, no. ¿Cómo hacer para
cuantificar los colores y ponerle límites? ¿Se le puede poner música a los
colores? Los intentos fueron varios: Arcimboldo (lo vimos aquí) construyó un
clavicordio de colores en la corte de Rodolfo II, a cuyas teclas le asignó un
color.
Castel, Clavicémbalo ocular, 1770 (Imagen: Wikipedia) |
Fray Castel, en 1720, inventó el clavicémbalo ocular. Hizo varios
prototipos y los mostró en varias cortes: era como un cilindro con ventanitas y
velas y con papeles de colores que se accionaban con una tecla.
Wilfred con su Clavilux (Imagen: Wikipedia) |
Y en 1920 fue
inventado el clavilux, que es un
aparato con 3 proyectores que emiten luz según el ritmo de una partitura. Es el
abuelo de los efectos especiales que vemos en eventos, teatros y discotecas.
Existe gente con un don especial que oye colores sin tener que acudir a estos aparatos. Sí, lo que te estoy diciendo. Esto se llama “sinestesia”, que es la capacidad de mezclar los sentidos de la percepción, p.ej.: saborear un color, palpar un sonido, etc., aunque el más común es el de oír colores. Dicen que es una propiedad neurológica normal, que no tiene nada que ver con las alucinaciones o evocaciones y que afecta a 1 entre 2000 personas; de ellas, la mayoría son mujeres.
Klee, Fuga en rojo, 1921 |
Hubo artistas sinestésicos muy
famosos: los compositores Scriabin, Messiaen y Schönberg, Bernstein, Liszt,
Rimsky-Korsakov, el poeta Belyi, David Hockney, van Gogh y ¡Kandinsky! (Si
quieres ver una lista más completa, pincha aquí: te llevarás más de una
sorpresa.)
Schönberg, Pensamiento, 1910 |
Bueno, de Kandinsky algunos dicen
que no lo era, pero poco importa, pues nos ha dejado muchísimas reflexiones
sobre el tema. Comenzó a investigar a partir de 1909, pero el 1ro de enero de
1911 fue decisivo: asistió junto con Gabrielle Münter, Marianne Werefkin, Franz
Marc y Alex Jawlensky a un concierto que Schönberg dio en Munich. Marc le
cuenta a Macke en una carta (¿te acuerdas de estos amigos? Pincha aquí) que
casi ni se podía oír la música: el público no aguantaba las disonancias de esa
composición tan moderna, arrastraban las sillas, se reían o carraspeaban… A
Kandinsky le causó tanta impresión lo que escuchó que pocos días después le
mandó una carta al compositor: encontró en su música lo que él estaba
proponiendo en pintura. Schönberg quedó muy sorprendido: estaba acostumbrado al
rechazo del público. Fue el inicio de una relación de la que nos quedan un
montón de cartas. Enseguida, Kandinsky pintó su cuadro Impresión III (Concierto), que, como dice el título, intenta revelar
con colores las sensaciones que le quedaron luego del evento. Schönberg también
comenzó a pintar.
Kandinsky publicó sus ideas sobre estas cosas en su libro “De lo espiritual en el arte” (1911) (algo vimos por aquí) . En él nos dice cosas tales como que el blanco es el silencio, que el negro es como un eco obstinato; que al rojo y el verde le corresponde la movilidad-inmovilidad o que el amarillo es espiritual y el azul, corpóreo.
Los 12 colores fundamentales de la Escuela Bauhaus, 1913 |
Kandinsky, Improvisación soñadora, 1913 |
Klee, Antigua pintura sonora en negro, 1915 |
Es una ópera de 1 acto y 6
“cuadros” en la que combina color, luces
de colores, danza y música. La composición de la música es de von Hartmann. No
tiene argumento ni diálogos. Todos los elementos están coordinados.
Kandinsky, Composición IX, sg.XX |
Los personajes están vestidos
cada uno con un color característico: un niño en blanco, un adulto en negro, 5
gigantes en amarillo como si fueran flores y otros personajes en rojo, que parecen
ser pájaros.
Kandinsky nunca pudo ver su obra
en el escenario: un poco porque el público no estaba preparado para este tipo
de cosas y, otro poco, porque no existían los recursos técnicos, p.ej., para
los cambios rápidos de los colores de las luces. Hubo un intento de ponerla en
escena en 1914 en Munich, pero el proyecto se cortó ante la 1º Guerra Mundial.
El estreno fue en 1972, en el Guggenheim de Nueva York, y en 1976 fue
presentada en París.
Kandinsky, Composición VI, 1913 |
Así que, cuando veas un cuadro de
Kandinsky, piensa en colores que se mueven y que cantan.
Si darte una idea de cómo es el Son amarillo, puedes pinchar aquí.
Kandinsky fue un precursor, sin duda.
Si darte una idea de cómo es el Son amarillo, puedes pinchar aquí.
Kandinsky fue un precursor, sin duda.
Kandinsky, Composición IV, 1911 |
Fuentes: Kandinsky, De lo
espiritual en el arte. Barcelona,
Paidós, 2010
Dittmann,L. Schönberg und Kandinsky. En: Litwin, St.-Velten,
K. Stil oder Gedanke?
Zur Schönberg-Rezeption in America in Europa.
Saarbrücken, 1995
notas personales
No hay comentarios :
Publicar un comentario