Sandro Botticelli, La calumnia de
Apeles
Seguramente habrás oído este
dicho. De origen latino, fue documentado por Francis Bacon en el sg. XVII (el
filósofo, no el pintor, ¡no te confundas!) y repetido una y otra vez…
Y por ser repetido no es que deje
de ser actual o deje de ser cierto.
Tampoco es que la calumnia sea
una cosa nueva. Existe desde que Adán y Eva mordieron la manzana.
Apeles, el gran pintor griego
(sg. 4 a.C.), también la sufrió en carne propia y pintó un cuadro sobre esta
experiencia. Luciano de Samosata lo vio varios siglos después y contó con lujo
de detalles cómo era. El cuadro se perdió, pero quedó la descripción: muchos
artistas del Renacimiento intentaron reproducirlo. Botticelli, entre ellos, a quien
no por nada se le ocurrió pintar este tema.
Es una obra extraña, si se
quiere, porque no es a lo que estamos acostumbrados a ver en él: Venus que nace
del mar y la Primavera rodeada de flores y las Tres Gracias. Es de la última
etapa del artista: aquí se respira otro clima.
Te invito a ver nuestro análisis
en la presentación de aquí abajo.
Fuentes: Argan, G.C.
Botticelli. Barcelona, Carroggio Ed., 1957
Santi, B. Botticelli.
London, Constable, 1976
Querida Cristina: cada entrada al blog es más interesante!!!
ResponderEliminar(mikel esparza)
Gracias, Mikel!
ResponderEliminarBuen verano!