Hoy es San Nicolás. O Santa
Claus, Papá Noel, Viejo Pascuero… (¿Cómo lo llamas tú?) No te voy a contar la
historia de cómo Nicolás de Bari, obispo de Mira, terminó siendo un gordito
risueño con barba blanca, gorro rojo y renos, que para eso está la Wikipedia.
Steen, La fiesta de San Nicolás, 1665 |
Se cuenta que venía de una
familia adinerada y que, al decidir ser sacerdote, repartió sus bienes entre los
pobres. Cierta vez se enteró de que un padre no tenía dinero para pagar la dote
de sus 3 hijas y Nicolás, en secreto, les arrojó monedas de oro por la ventana.
Lorenzetti, Fra Angelico, da Fabriano, Masaccio nos mostraron este suceso.
Fra Angelico, Nacimiento de San Nicolás, vocación y limosna, 1437 |
Hoy en algunos lugares los niños
reciben regalos, como hacía San Nicolás. No son de ésos que vienen envueltos en
papeles brillantes. Los niños esperan con ansias la bolsita con caramelos,
galletas, nueces, frutas… o carbón o piedras…: la cosa está en si te portaste
bien durante el año, sacaste buenas notas en la escuela… o no. ¡Qué miedo, no? Me imagino que al principio
les carcomerá por dentro la duda, pero, al pasar los años, se darán cuenta de
que los papás se apiadan de ellos y nunca hay castigo…
da Fabriano, San Nicolás y las 3 jóvenes pobres, 1425 |
Y bueno, no hay otro pintor que
haya inmortalizado este día como Jan Steen.
Duccio, San Nicolás de Mira, 1311 |
Es un pintor holandés del siglo
XVII, contemporáneo de Vermeer, Rembrandt, Cuyp, van Ruisdael y tantos otros.
Se especializó en pintura costumbrista, aunque también tiene obras religiosas y
retratos. Su obra tiene siempre algún detalle de fino humor o ironía. No es
tremendista o lúgubre, para nada. Se sabe que era católico, un católico en
medio de un contexto protestante-calvinista. En su pintura de tipo religiosa
sólo aparecen personajes del Antiguo Testamento: sus clientes no son católicos.
Pero la fiesta de San Nicolás en Holanda es algo que va más allá, una fiesta
popular y tradicional (estuvo prohibida un tiempo, pero aun así…). Los pequeños
dejan sus zapatos la noche del 5 de diciembre, esperando a que Nicolás llegue
desde España en su caballo y con su ayudante (sin renos, ¿eh?, que en Holanda
no los hay), baje por la chimenea y les deje su premio o castigo…
Es un cuadro que, cuanto más lo
observas, te saca una sonrisa. En el centro tenemos a una niña (la modelo fue
su hija Catharina) aferrada a su regalo: un muñeco-San Juan Bautista. La madre
se lo pide y ella se lo niega. Lleva en su brazo un cubo lleno de dulces,
típicos de esta festividad. En el centro, uno de los hermanos (en realidad, su
hijo Cornelis), se ríe de su otro hermano (Cornelis, otro hijo de Steen), el que
está a la izquierda. Éste está llorando desconsolado: uno que no logró alcanzar
las expectativas de sus padres ese año. Más atrás se encuentra la criada, con
el zapato lleno con ramitas. Pero esto durará poco: la abuela tiene un regalo
escondido detrás de la cortina de la cama y se ríe para sus adentros. El padre
contempla la escena. Y hay más personajes a la derecha: un niño cantando y otro
muchacho con un bebé en sus brazos al que le muestra por dónde vino Sinteklaas
(como se llama Santa Claus en Holanda). El bebé tiene en sus manos una galleta
con la forma del santo.
Steen, La fiesta de San Nicolás, 1665 (de nuevo, para que lo puedas ver mejor) |
Pero eso no es todo: fíjate en la
variedad de panes y dulces. Son verdaderas naturalezas muertas dentro de un
cuadro costumbrista, pintadas con todo detalle. Hay dulces típicos y manzanas y
naranjas y nueces…
Lorenzetti, Escenas de la vida de San Nicolás, 1330 |
La composición del cuadro es
perfecta. Las figuras están ubicadas en las diagonales del plano. La vista del
espectador va de un personaje a otro, como si fuera una ronda… ¡Fíjate en el
juego de miradas de uno y otros y en los gestos de cada uno!
Tiene un formato mediano: 82 x 70
cm, y se encuentra en el Rijksmuseum de Amsterdam. Steen pintó este tema varias
veces: una fiesta que compartía todos los años con su familia. Mira este otro:
bastante semejante, seguramente para un cliente protestante, pues la
protagonista ya no tiene en sus manos un San Juan Bautista, sino una galleta.
Steen, La fiesta de San Nicolás, 1668 |
Y tú, ¿celebras este día?
Fuentes: Hubala, E.
Die Kunst des 17.Jahrhunderts. Berlin, Propyläen V., 1990
Kirschenbaum, B.D. The religious and
historical paintings of Jan Steen. New York, Allanheld & Schram, 1977
Van Suchtelen, A. Jan Steen’s Histories.
Zwolle, Uitgeverij de Kunst, 2018
Jajjaja las veces que me amenazaron que Papá Noel me traería carbón!!!!!
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